Solemnidad de la Santísima e indivisa Trinidad, en la que confesemos y veneramos al único Dios en la Trinidad de personas y la Trinidad de personas en la unidad de Dios.
Otros santos del día:
- San Agustín, obispo de Canterbury, en Inglaterra, el cual, habiendo sido enviado junto con otros monjes por el papa san Gregorio I Magno para predicar la palabra de Dios a los anglos, fue acogido de buen grado por el rey Etelberto de Kent, e imitando la vida apostólica de la primitiva Iglesia, convirtió al mismo rey y a muchos otros a la fe cristiana y estableció algunas sedes episcopales en esta tierra. Murió el día 26 de mayo (604/605).
- En Dorostoro, en la Mesia Inferior, hoy Silistra, en Bulgaria, san Julio, mártir, que por ser veterano y licenciado de la milicia fue apresado por los oficiales y entregado al gobernador Máximo en época de persecución, y al maldecir en su presencia a los ídolos y confesar hasta el fin el nombre de Cristo, fue condenado a muerte (hacia el 302).
- En la vía Nomentana, en el miliario décimosexto desde la ciudad de Roma, san Restituto, mártir (hacia el s. IV).
- En Orange, de la Provenza, en Francia, san Eutropio, obispo (hacia el 475).
- En Wurzburgo, de Franconia, en Alemania, san Bruno, obispo, que reconstruyó la iglesia catedral, reformó el clero y explicó al pueblo las Sagradas Escrituras (1045).
- En el monasterio de Montsalvy, en Auvernia, de Aquitania, hoy en Francia, san Gausberto, presbítero y ermitaño, que, por sus trabajos, aquel lugar, antes espantoso, se convirtió en un hospicio para acoger a los peregrinos (1079).
- En el lugar de Dryburne, junto a Durham, en Inglaterra, beatos Edmundo Duke, Ricardo Hill, Juan Hogg y Ricardo Holiday, presbíteros y mártires, quienes, después de realizar su formación en el Colegio de los Ingleses de Reims, regresaron a su patria y fueron condenados a muerte y ahorcados en tiempo de la reina Isabel I, sólo por el hecho de ser sacerdotes (1590).
- En Seúl, en Corea, santas mártires Bárbara Kim, viuda, y Bárbara Yi, virgen de quince años de edad, las cuales, encarceladas por Cristo a un mismo tiempo, murieron por causa de la peste (1839).
- En el lugar de Nakiwubo, en Uganda, san Atanasio Bazzekuketta, mártir, quien siendo uno de los pajes de la casa real, y recientemente bautizado, mientras era conducido al lugar del suplicio con algunos otros por su fe en Cristo, rogó a los verdugos que le matasen allí mismo, y culminó el martirio batido a golpes (1886).
- En la aldea de Lubawo, también en Uganda, san Gonzaga Gonza, mártir, que era uno de los sirvientes del rey, y estando impedido por los grilletes, mientras era conducido a la hoguera fue traspasado con lanzas por los verdugos (1886).
(Del Martirologio Romano)