Imagen con mensaje

Jamás debe un pecador temer ser rechazado por María si recurre a su piedad, porque ella es la madre de la misericordia - San Alfonso María de Ligorio

Estamos hechos de naturaleza humana. Por lo tanto, estamos sometidos a todas las imperfecciones. Resulta muy fácil caer en el pecado, abandonar el camino que nos lleva a Dios por los placeres y miserias del mundo. Pero si acudimos a María, nuestra Madre del cielo, si imploramos su ayuda, aunque estemos encenagados, encontraremos en ella ayuda. Porque una madre nunca abandona a sus hijos, aunque éstos no se porten como deben. No tengamos nunca miedo de acudir a María.

¿Te ha gustado? Comparte este artículo

Evangelio del día

Juan 6, 52-59

Juan 6, 52-59

En aquel tiempo, disputaban los judíos entre sí: -«¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?». Entonces Jesús les dijo: -«En verdad, en verdad os

Continuar leyendo »
San León IX

San León IX

En Roma, en la basílica de San Pedro, san León IX, papa, que primero fue obispo de Tulle durante veinticinco años, defendiendo enérgicamente a su

Continuar leyendo »