Imagen con mensaje

El humilde apaga la soberbia, pero el soberbio no puede dañar a la humildad – Santa Catalina de Siena

Solamente si nos reconocemos pequeños, pecadores y mendigos del perdón de nuestro Padre Dios y del de los hermanos, podremos transitar por la senda de la virtud, que es por donde debemos caminar siempre. Por eso es preciso que no cedamos nunca a las tentaciones que nos impelen a considerarnos fuertes, superiores a los otros y merecedores de alabanza, porque la soberbia nos alejará del Reino.

¿Te ha gustado? Comparte este artículo

Evangelio del día

Santa Adelaida

Santa Adelaida

En Selz, cerca de Estrasburgo, en la Lotaringia alemana, santa Adelaida, emperatriz, que se distinguió por mostrar con los familiares una gran alegría, una infatigable

Continuar leyendo »