Un maestro que no dé ejemplos de lo que enseña tiene pocas posibilidades de ser comprendido e imitado. El cristiano que desee convencer a los demás solamente con sus palabras, está expuesto a que su enseñanza no sea útil. Porque la mejor predicación, como dice la sabiduría popular, es el buen ejemplo. Como vivamos seremos evaluados, por los hombres y por Dios.

Lucas 1, 39-56
En aquellos días, María se levantó y se puso en camino de prisa hacia la montaña, a una ciudad de Judá; entró en casa de