¿Qué esperamos en esta vida? Si somos cristianos auténticos, nuestra aspiración tiene que ser llegar a estar lo más cerca posible de nuestro Señor. Para ello, tendremos que irnos desprendiendo de todo lo que nos impide la cercanía a Dios. Hay muchas cosas que nos atan, muchos intereses terrenales y mundanos que nos ocultan lo hermoso que es vivir conforme nos indica el Evangelio. A medida que vayamos desprendiéndonos de tanta superficialidad, egoísmo y podredumbre que nos atan a lo material, iremos descubriendo que merece la pena vivir siendo buenas personas que buscan ser fieles a quien nos ha creado.

Lucas 1, 26-38
En el mes sexto, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre

